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Mientras que caminaba por el Camino Portugués, traté de comenzar a cocinar cuanto antes después de salir de la ducha para evitar el aprieto de la cena.Si puedes, es una gran idea repasar lo que hay en la cocina ya antes de ir a la tienda o empezar a preparar la comida.Ciertos albergues van a tener ingredientes básicos a fin de que cualquiera los use, como el aceite de oliva y las especias. En otros, tendrás suerte si encuentras un cuchillo que no esté embotado. ¿Qué deberías cocinar? Es difícil equivocarse con la pasta o algún género de arroz. Mi comida de camino era verduras salteadas y judías en salsa de tomate sobre arroz. Aunque definitivamente preferí las comidas calientes (en especial después de un largo día de lluvia en el Camino Portugués), asimismo puedes hacer una comida satisfactoria con carne, queso, aceitunas y pan. No te olvides del vino! Lo que sea decidas preparar, asegúrate de lavar tus ollas, sartenes, tabla de cortar, etc. tan pronto como termines de usarlas NO una vez que termines de comer. Otras personas precisarán utilizarlas.Hora de acostarse
En la mayor parte de los albergues municipales, las luces se apagan entre las 10 y las 11 de la noche. La mayoría de los peregrinos están en la cama incluso antes de eso. En caso de que desees ir a dormir antes que se apaguen las luces oficiales, te invito a que tengas tapones para los oídos y una máscara para dormir. Antes que te vayas a dormir, ten todas tus cosas empaquetadas y listas para la mañana siguiente. Esto es particularmente esencial si planeas comenzar temprano (antes de las 7 a.m.). Si eres uno de los primeros peregrinos en levantarse, debes tomar todas tus cosas y cambiarte/prepararte en el área común en vez de en el dormitorio. Por la mañana, todos los peregrinos deberán estar fuera a las ocho-8:30 a.m.
Otros lugares para alojarse en el Camino de Santiago
Además de los albergues municipales y privados, otros lugares para alojarse en el Camino de la ciudad de Santiago son las pensiones, hostales, casas rurales y hoteles. Estas opciones cuestan más que los albergues, pero conseguirá más privacidad y comodidad por sus euros extra.Cuando recorrí el Camino Portugués de la Costa, me alojé en varios hoteles económicos y compartí el costo de una habitación privada con otro peregrino.
Alojamiento para peregrinos en S. de Compostela
El único sitio que claramente aconsejo reservar alojamiento de antemano es S. de Compostela.No hay un albergue municipal en el centro de la ciudad, conque si deseas estar cerca de la acción (mejor para festejar), tendrás que reservar algo privado.
Puede que desees reservar alojamiento en Santiago de Compostela
Existen muchos alojamientos para peregrinos a costos razonables en S. de Compostela. No diré que jamás he oído de nadie que acampe en el Camino, mas debes saber que, rigurosamente hablando, no está tolerado. En España está prohibido el campismo libre.Puesto que los tramos de cada senda del Camino pasan por medio de la propiedad privada de la gente, decidir campar podría significar que estás invadiendo un a propiedad privada. Piensa en cómo te sentirías si un extraño estuviera durmiendo en tu patio.
Reflexiones finales sobre el Camino de la ciudad de Santiago y su albergues
Para una experiencia equilibrada del Camino, me gusta alojarme en una mezcla de albergues municipales y privados. Tienes la tradicional experiencia del peregrino mientras que también tienes unas cuantas noches de sueño decente. Es más que posible permitirse una mezcla con un presupuesto estándar de Camino. Incluso si pudiese dejarme el lujo de quedarme en hoteles durante mi camino, aún desearía pasar unas cuantas noches en albergues municipales. Son el mejor sitio para la camaradería, y si deseas hallar a tu familia del Camino, alojarte en albergues públicos de peregrinos es una necesidad.
Cientos de miles y miles de personas hacen el peregrinaje en el Camino de Santiago todos los años y los números siguen incrementando. Es posible que esté considerando hacer la peregrinación mismo y esté haciendo planes de antemano de lo que puede ser un viaje, si toma el Camino Francés, de hasta setecientos ochenta km, la mayor parte a pie si quiere ser tradicional.
Caminar el Camino de Santiago de una sola vez es casi imposible. El Camino Francés te llevaría prácticamente 78 horas aun si caminaras a 10 quilómetros por hora. Probablemente su viaje le lleve entre 30 y 35 días, a menos que sea sobrehumano, pues es poco probable que ande más de 25 quilómetros día a día.
Opciones para dormir en el Camino de Santiago
Ya habría de ser bastante obvio que vas a necesitar un sitio para descansar tu cabeza agotada si estás caminando por el Camino de la ciudad de Santiago, pero ¿qué opciones tienes, qué coste tienen y están disponibles? Este es el género de preguntas que deberías hacerte antes de embarcarte en lo que será un viaje épico. La opción de alojamiento más simple y económica es llevar una tienda de campaña contigo. La humanidad ha usado tiendas de campaña durante miles y miles de años y es simple ver por qué. Las tiendas de campaña son una suerte de casa móvil que son, normalmente, ligeras, simples de transportar, simples de edificar y hacen un buen trabajo de protección contra los elementos.
Si bien son asequibles, las carpas tienen desventajas con respecto a los ladrillos y morteros. Una de ellas es que debes llevar tu tienda contigo. Mientras que las tiendas modernas son de forma frecuente construidas con materiales ligeros, es probable que necesite otros artículos como sacos de dormir, almohadas, sábanas y cualquier otra cosa que necesite basándonos en lo que considere que es el confort de su criatura.
albergues y hoteles en del Camino de Santiago
Hay cientos de hoteles y hostales a lo largo del Camino de Santiago y estos son, con mucho, la elección más popular de los peregrinos que procuran un sitio donde pasar la noche. Estos hoteles y hostales pueden ser difíciles de reservar con antelación a lo largo de las épocas más populares, como cuando el tiempo es mejor, mas todavía se puede encontrar un sitio para alojarse en las ciudades más grandes durante la senda. Los hostales son conocidos como albergues y hay una vasta red de ellos a lo largo del Camino de la ciudad de Santiago, particularmente en el Camino Francés. Para una experiencia genuina, busque los albergues dirigidos por hospitaleros que son voluntarios del Camino. No se pueden reservar estas habitaciones con cierta antelación pues se ofrecen a los peregrinos por orden de llegada. Tenga presente que los albergues se ofrecen a los peregrinos a pie más que a los que hacen el viaje por otros métodos como el turismo o bien el caballo. Las pensiones, o casas de huéspedes, le permitirán más privacidad ya que son generalmente propiedades familiares donde tiene su propia habitación y baño; ciertos aun dan la cena. Las pensiones son más caras que los albergues, y estos últimos están libres desde tan solo 3 euros por noche.
Su otra alternativa es un hotel. Estos solo acostumbran a estar disponibles en las urbes más grandes del Camino y varían brutalmente en los costes en función de lo ocupados que estén y de la clasificación por estrellas de la propiedad.
albergues (albergues de peregrinos)
El sistema de albergues de peregrinos es una característica única del camino, singularmente del Camino Francés, que permite a los peregrinos dormir en alojamientos tipo dormitorio por cinco-quince euros por noche. En la senda francesa, estos alojamientos son muy usuales, con tan solo cinco km entre albergues y solo unos pocos tramos de hasta 15 km entre albergues. La mayoría de los albergues se ofrecen por orden de llegada y no pueden reservarse con antelación, con la excepción de algunos albergues privados. La persona encargada de un albergue se conoce como hospitalero (hombre) o bien hospitalera (mujer), véase más adelante.
Hay múltiples géneros de albergue disponibles en
Los albergues parroquiales son operados por instituciones religiosas como monasterios, conventos o iglesias locales. Tienden a ser simples, pero ofrecidos con mucho cuidado por cuidadores voluntarios. Muchos de estos alojamientos se ofrecen en forma de donación (donativo) o por un coste fijo bajo.
Los albergues de la asociación son operados por varias asociaciones de peregrinos de todo el mundo. Frecuentemente son atendidos por voluntarios que han hecho el Camino ya antes, así que tienen un buen sentido de lo que los peregrinos precisan. Los albergues de la asociación se complementan con donaciones, con lo que a menudo se ofrecen en forma de óbolo o por un precio bajo.
Los albergues privados son propiedad y están dirigidos por individuos o bien conjuntos privados. Los albergues privados de forma frecuente ofrecen un alojamiento más cómodo con ofertas “extra” como comidas, lavado/secado, internet, wifi, etc. Aunque el coste es a veces más alto (un promedio de 10 euros por noche), la satisfacción de apoyar un negocio local no tiene precio. Ciertos albergues privados son propiedad de viejos peregrinos y tienen un aire agradable, otros tienen un aire más impersonal de hotel. Ciertos albergues privados se han unido para formar una red con determinadas reglas, estos se conocen como albergues de la red.
Hospitalero/Hospitalera
Es el término de España para la persona a cargo de un albergue. Este puesto puede ser ocupado por una persona local, voluntarios internacionales, monjas y frailes, que con frecuencia se quedan por unas semanas o bien meses. Sea cortés y exprese su gratitud a los hospitaleros siempre y cuando sea posible y respete las reglas aunque no tengan sentido para . Es un trabajo agotador, con lo que no es de extrañar que la mayoría de los peregrinos tengan cuando menos una experiencia con un hospitalero/a gruñón o dogmático. Una máxima popular publicada en ciertos albergues es: El turista exige, el peregrino agradece.
Cientos de miles y miles de personas hacen el peregrinaje en el Camino de la ciudad de Santiago de año en año y los números prosiguen incrementando. Es posible que esté considerando hacer la peregrinación mismo y esté haciendo planes por adelantado de lo que puede ser un viaje, si toma el Camino Francés, de hasta setecientos ochenta km, la mayoría a pie si desea ser tradicional.
